Complementos que no puedes olvidar el día de tu boda
Si ya tienes listo el vestido, has de saber que la búsqueda de tu look no ha terminado. ¡Te faltan los complementos! Los accesorios con los que completes tu estilismo serán los que te hagan lucir elegante y sofisticada, y darle un toque muy especial. ¿Quieres saber cuáles son esos complementos que no puedes olvidar el día de tu boda y cómo escogerlos? ¡Sigue leyendo!
Las joyas
Las joyas principales, que no debes olvidar, son los pendientes, la gargantilla y las alianzas. Sobre las alianzas, no hay nada escrito, ¡guíate por tus gustos y los de tu pareja! Las elecciones pueden ser dos modelos iguales o diferentes, ¡como vosotros queráis!
Sobre los pendientes, tenemos algo más que decirte. Y es que, debes tener en cuenta ciertos factores para no cometer un error a la hora de escogerlos. Piensa en el vestido de novia que vas a llevar, en el escote y en el color del mismo.
Si vas a lucir un escote palabra de honor, ten en cuenta que el cuello y el pecho quedarán libres, por lo que debes escoger unos pendientes finos que puedas complementar con, por ejemplo, una cadenita a juego. Si no quieres lucir colgante, puedes apostar por unos maxi-pendientes.
Con un escote cuadrado, la cosa cambia, porque si quieres llevar collar, debe ser muy corto, para que no quede por debajo del cierre del escote. En cuanto a los pendientes, los largos con forma de gota y algún brillante, son ideales para este modelo.
Al cuello barco le sientan bien todo tipo de pendientes, ya sean de piedras o brillantes. Eso sí, recuerda que cuanto más grandes sean los pendientes, menos posibilidades habrá de que lleves un colgante.
Con un escote halter, deberás prescindir de gargantilla y optar solo pendientes. Te recomendamos que lleves el pelo recogido, por ejemplo, con una coleta a media altura para poder lucirlo bien, y unos pendientes finos, largos o diminutos, como tú prefieras.
Si en tu escote llevas malla ilusión, no te pongas colgante y luce pendientes que sean brillantes, para que se complementen a la perfección con el tul del vestido.
El color de las joyas debe ir en función del color del vestido. Si escoges un diseño en color blanco, las joyas metalizadas como la plata, el platino o el oro blanco o rosa, le sentarán genial. Por el contrario, si el vestido tiende más a un color marfil o champán, la elección adecuada serán los colores dorados o las piedras de colores.
Los zapatos
Ya tienes el vestido. ¡Ahora los zapatos! Lo más importante es que te sientas cómoda con ellos, pues pasarás muchas horas subida a ellos, y andarás y bailarás hasta que pierdas la cuenta. Después de esto, lo más importante es que te guste el diseño y que combine a la perfección con el vestido. Muchas firmas dan la opción de personalizarlos y confeccionarlos a tu gusto, por lo que, si tienes claro exactamente lo quieres, ¡no lo dudes!
Los zapatos pueden ser el elemento protagonista de tu look si vas a llevar un vestido sencillo, sin pedrería, sin encaje y sin volantes. En ese caso, puedes escoger unos zapatos joya, con lentejuelas, purpurina, flecos, perlas, piedras… y en colores como el fucsia, el aguamarina, el morado, el rosa empolvado o el azul cielo. Escoge tonos pastel si la boda es de día y colores más intensos si la boda es de noche. Si no, es mejor que optes por unos zapatos en color metalizado, como el dorado envejecido, o en algún color poco llamativo como el nude.
El material para los zapatos puede ser seda, satén, cuero o terciopelo, siendo este último ideal para una boda de invierno.
El tocado
Los tocados son ese accesorio que marca la diferencia y cambia por completo cualquier look. Siempre aportan un toque especial y diferente, pero es importante elegirlo bien si no se quiere obtener el resultado contrario.
Si te casas de día, podrás llevar el tocado que desees, pequeño, grande, en forma de corona, de flores, con detalles… En cambio, si te casas por la tarde, las posibilidades se reducen, pues el peinado podrá ir acompañado de un pequeño tocado o accesorio para el pelo, y lo más recomendable es que sea en tonos metalizados, dorados o plateados.
Una idea perfecta es combinar los detalles del vestido de novia con los del tocado. Por ejemplo, si el vestido tiene un bordado floral en color cobre, puedes escoger un tocado en el mismo color hecho a base de flores. Si lleva varios colores, intenta combinarlo también con los zapatos.
También influye si la boda se celebra en verano o en invierno. Si se realiza en la época estival, las flores y los colores son bienvenidos. En cambio, si se va a celebrar en los meses más fríos del año, los tocados de terciopelo, los tocados-joya o con accesorios como las plumas, son los más indicados.
¡Ya sabes cómo empezar a elegir tus accesorios! Si aún no has comenzado con la búsqueda de tu vestido de novia, pide cita y te ayudaremos, no solo a crear el diseño perfecto para ti, sino también a escoger el resto de complementos para crear un look ideal.
